Una de las descripciones más sencillas que te podemos dar acerca de un proceso de impermeabilización es que es la aplicación de una barrera física a los pisos y paredes para evitar que la humedad penetre en la estructura de la casa. La membrana impermeable se aplica antes de colocar las baldosas para proteger las paredes y el piso.

Cada año un gran número de casas, comercios e industrias sufren graves daños y problemas que pueden estar asociados con una impermeabilización inadecuada de los edificios, lo cual sucede por lo regular en época de lluvias. Si no se detiene la penetración de agua a tiempo, los daños causados pueden ser tan grandes que el costo de reparación se eleve, causando grandes mermas económicas.

En cuestiones de salud, un edificio que no está debidamente impermeabilizado, es propenso a que la humedad quede atrapada y ser un factor potencial de convertirse en un caldo de cultivo para hongos, mohos y otras bacterias. El crecimiento de dichos microorganismos puede suponer un peligro para la salud, ya que desencadenan alergias o cosas peores.

La impermeabilización es muy importante para la estructura. Una vez que está dañado, no se puede devolver a su estado original. Cuando se forman grietas en el techo, pueden provocar fugas, especialmente debido a la acumulación de agua. Las goteras del techo se extienden por todo el edificio y pueden dañar los electrodomésticos, las estructuras de madera y los muebles incorporados. También pueden tirar o romper el aplanado.


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